El beneficio de una
sonrisa o un saludo. La corrección de los actos y las expresiones de respeto
son siempre recompensadas en formas
simples: gestos, sonrisas pero justo en el momento en que las necesitas…
Muchas veces estamos
tan cansados de esperar las respuestas a nuestros actos y deseos que desistimos
y caemos en el juego de la impaciencia. El secreto consiste en no esperar la
retribución porque quizás justo en ese momento no la necesitamos.
Aprendí a pensar que
era como un vaso que se llenaba lentamente hasta que no daba más y se derramaba
convertido en “retribuciones necesaria” lo que me hace sentir respeto y cuidado
con lo que deseo porque suele pasar que todos esos deseos pueden rebosar también el vaso.
También me acostumbré a
agradecer por todo lo que tenía incluso por aquello que no, porque de
necesitarlo seguramente estaría en las arcas de mi vida, esperando para
convertirse en una retribución. Cierto día llegué a mi trabajo, el calor era insoportable
y angustiante; para colmo, había dejado
mi comida olvidada en casa lo que significaba que pasaría el día sin comer.
Como tenía algo de dinero en reserva decidí comprar algo para mitigar el hambre.
Me detuve en la pequeña cafetería a lo que voy todos los días por café y pedí
una empanada. La Señora del local me dijo que no tenía nada para ofrecerme ya
que se encontraban preparando unos almuerzos que le habían contratado de una
oficina. Sin embargo, al ver mi cara hambrienta me dijo que regresara en unos
minutos mientras preparaba la empanada. Me devolví a la oficina por el dinero
que tenía reservado y de esa manera
cancelar el costo de la empanada y un café que era lo único para lo que me
alcanzaba el efectivo que tenía. Al llegar al mostrador de la cafetería la Sra.
tomó el dinero y lo colocó en la caja registradora y de regreso depositó en el
mostrador un plato con un almuerzo completo.
Al darse cuenta de mi
sorpresa, me dijo: - Siéntese allí y coma tranquilo que no he tenido tiempo de
preparar su empanada*. Coma tranquilo y disfrute. Aquel obsequio desinteresado
la Sra. De la cafetería, no sólo llenó mi estomago sino también mi esperanza en
la bondad humana para construir un mundo mejor.
Es claro para mí que
fue un desborde del vaso de las retribuciones del que hablaba. Pensé en ese
momento y sentí un profundo agradecimiento. Cuando la figura de la Sra. Reapareció
nuevamente, con un vaso pero esta vez lleno de un refrescante jugo. - ¡Tómeselo
para que pase la comida! Dijo con rebosante alegría, su rostro estaba iluminado
con una enorme sonrisa y yo un tanto avergonzado.
Esa noche, cuando
regresé a casa agradecí los hechos del día que siguen confirmándome la belleza
de la vida.
Aquellos que tienen un
sentido claro en sus vidas, también lo tienen en sus actos, en el cómo perciben
al otro y en el respeto a todo ser viviente, y quien así vive, siempre verá desbordarse
el vaso de la abundancia y las retribuciones en su vida…
Feliz Noche… que
descansen.
Elio Montiel para
Elio Montiel para
Píldoras para dormir
conmigo mismo.
*Plato típico Venezolano hecho con masa de maiz y relleno en forma de media luna
*Plato típico Venezolano hecho con masa de maiz y relleno en forma de media luna
Elio Montiel
No hay comentarios:
Publicar un comentario